Te contamos cómo cuidar tu piel a medida que envejece
Desde el nacimiento hasta los últimos años de vida debemos cuidar nuestra piel, aquí te contamos cómo debes hacerlo ya que puedes adelantarte de muchas de las preocupaciones construyendo una buena rutina de piel:
- Rutina de piel desde el nacimiento: la principal preocupación es la protección solar. Una simple hidratación con protector pueden marcar la diferencia y hacerte aparentar 10 o 15 años menos en el futuro. Es tu aliado #1 en tu rutina diaria.
- Rutina de piel en la adolescencia y a los 20 años: el acné es la principal preocupación por lo que es importante comenzar a utilizar un limpiador suave según el tipo de piel. Además puedes comenzar a hidratar tu piel con productos suaves como el Agua de Rosas, la cual puedes adquirir aquí: https://www.laboratoriosathos.com/producto/agua-de-rosas/
- Rutina de cuidado de la piel a los 30 años: aquí comienza nuestra principal preocupación por el resto de nuestras vidas: las primeras arrugas, por lo que es importante comenzar con hidratación a través de cremas y serum en las noches. No olvides también hidratar la piel con aceites y cremas corporales como las que tenemos en Athos: https://www.laboratoriosathos.com/producto/crema-corporal-de-coco/ https://www.laboratoriosathos.com/producto/aceite-de-almendras/
- A los 40 años: al producir menos colágeno, la piel va perdiendo firmeza y grosor por lo que es buena comenzar a promover la elasticidad y firmeza en la piel con productos especializados para este fin. También es importante comenzar a cuidar la piel alrededor de los ojos con un contorno de ojos ya que son sensibles a las nuevas arrugas.
- Rutina de piel a los 50 años: Es importante prestarle atención a la luminosidad y la textura de la piel, además de las arrugas y líneas de expresión.
- A los 60 años en adelante: además de todas las preocupaciones anteriores, empieza una nueva: la sequedad, por lo que se sugiere usar una crema hidratante más pesada o de más uso como en la mañana y en la noche. Adicional debes prestarle especial cuidado al cáncer de piel y visitar tu dermatólogo mínimo una vez al año.